Querida Laura …
El viernes es un buen día para nacer. Cuando la mayoría de los españoles echa el cierre, tú comienzas una nueva etapa. La etapa de la vida. Pero si algo tienes en común con el resto de los mortales, es que naces en un momento de crisis, aunque eso si, no precisamente afectiva. Es el año en el que gobierna Zapatero, se producen casi a diario Conferencias sobre el Cambio Climático, la Selección Española de fútbol ha ganado el Mundial o el disidente chino Liu Xiaobo ha obtenido el premio Nobel de la Paz, entre otros muchos grandes eventos destacados.
Tu hermano ya te lleva por los pasillos del hospital cual heroína en el que para él es su tractor particular. No es consciente que la que habita encima no es una simple pasajera y hasta tiene billete de permanencia y no un billete “sencillo”. Pronto te enseñará que Pocoyo es el más grande sobre la tierra o que sus coches no son para pasear a tus muñecas de cuento. Pero tarde o temprano te darás cuenta que lo verdaderamente importante es que él estará ahí para guiarte.
Ahora duermes tranquila en tu cuna y los demás te miran con dulzura pero pronto mirarás con ojos de asombro todo lo que te rodea. Ahora todos te quieren descubrir a ti pero tú pronto querrás ver el mundo por ti misma. No te voy a decir que no tengas prisa por descubrirlo porque realmente hay cosas maravillosas que seguro te llenarán de felicidad. También hay cosas malas, no voy a decir que no, pero si sabes perdonar, olvidar y sobre todo ayudar, tu paso por el mundo estará más que justificado. Como se suele decir “la vida no es un camino de rosas“, no te voy a engañar, de vez en cuando te encontrarás con alguna espina. En tus manos estará tener la decisión y la valentía de luchar, que los problemas rocen tu alma pero no habiten en ella.
Pero volviendo a las cosas buenas que es lo primero que quiero que descubras, ahí verás a tu familia, a tus amigos y a esa esencia que harás tuya llamada “tu manera de vivir”. Todo eso hará un conjunto maravilloso por el que estoy segura te sentirás orgullosa. Ahora mismo lo tienes todo, de ti depende que la felicidad que ha provocado tu nacimiento, la prolongues el resto de tu vida. Como verás no te estoy poniendo una tarea fácil, pero si la mejor manera de vivir. No me voy a exceder más con los deberes. Eres muy pequeña y tienes el deber de disfrutar. La vida en si, está hecha para ti.
Ahora duermes tranquila en tu cuna y los demás te miran con dulzura pero pronto mirarás con ojos de asombro todo lo que te rodea. Ahora todos te quieren descubrir a ti pero tú pronto querrás ver el mundo por ti misma. No te voy a decir que no tengas prisa por descubrirlo porque realmente hay cosas maravillosas que seguro te llenarán de felicidad. También hay cosas malas, no voy a decir que no, pero si sabes perdonar, olvidar y sobre todo ayudar, tu paso por el mundo estará más que justificado. Como se suele decir “la vida no es un camino de rosas“, no te voy a engañar, de vez en cuando te encontrarás con alguna espina. En tus manos estará tener la decisión y la valentía de luchar, que los problemas rocen tu alma pero no habiten en ella.
Pero volviendo a las cosas buenas que es lo primero que quiero que descubras, ahí verás a tu familia, a tus amigos y a esa esencia que harás tuya llamada “tu manera de vivir”. Todo eso hará un conjunto maravilloso por el que estoy segura te sentirás orgullosa. Ahora mismo lo tienes todo, de ti depende que la felicidad que ha provocado tu nacimiento, la prolongues el resto de tu vida. Como verás no te estoy poniendo una tarea fácil, pero si la mejor manera de vivir. No me voy a exceder más con los deberes. Eres muy pequeña y tienes el deber de disfrutar. La vida en si, está hecha para ti.
